La confusión, desfragmentación y unificación del lenguaje
Hablar en lenguas, o la confusión, desfragmentación y unificación del lenguaje, se propone como un espacio de sugestión, observación, exhibición y sistematización de investigaciones y obras que surgen de la relación lenguaje escrito, verbal y simbólico en relación a la practica de arte, ciencia y tecnología.
Desde este contexto, se reflejan en esta deriva del conocimiento diversos hitos históricos y actuales que constituyen relaciones improbables de la utilización del lenguaje en campos sociales, artísticos, políticos y económicos, pero que de alguna forma, construyen mediante la sugestión, una deriva creativa a propósito de los cambios de paradigma producidos por las tecnologías en relación a la evolución de la sociedad, mas específicamente, a los últimos 50 años aproximadamente, desde la masificación del uso de computadores en contextos sociales, y de otras tecnologías que provienen de la industria e inteligencia militar.
Oceano de 1 centimetro de profundidad, Daniel Cruz
Mediante nociones de inclusionismo radical, la curatoria de la bienal aplica una metodología donde nociones o conceptos que aparentemente no tenían nada en común, como la literatura y las artes visuales, las ciencias astronómicas y los lenguajes audiovisuales, encuentran vías de conexión virtuosas, intentando descubrir la constitución del lenguaje de la emergente cultura digital, y de la relación arte, ciencia y tecnología.
Un hecho importante es la identificación de una serie de hitos que ha dado forma a los cambios drásticos en los campos de la comunicación simbólica del arte y la cultura. Por lo tanto, es concretamente en el tiempo previo a la bienal, y durante su desarrollo, que se analizará en conjunto con los artistas, colaboradores y comunidad en general, el desarrollo de narrativas híbridas, como las técnicas pictóricas prehistóricas reflejadas por Werner Herzog en “La Cueva de los Sueños Olvidados”1, el desarrollo textil de las civilizaciones andinas o las nociones de la tetralectica para el lenguaje de civilizaciones ancestrales, que de alguna forma, vuelven a encontrarse en internet como códigos “gestalticamente empaticos”2.
Es así como «Hablar en Lenguas», y se refiere a la confusión de las comunidades, la falta de dialogo entre personas, instituciones, países, entre otros, a la incomprensión de lecturas, legislaciones, conocimientos, que mantienen nuestra sociedad en un estado de caótica armonía. Hablar en Lenguas es una búsqueda de códigos de entendimiento colectivos, pero parte de la confusión, de la saturación de la información, para luego, mediante su espacio expositivo, limpiar y minimilizar saberes, conductas, percepciones.
Se realizan metáforas y analogías entre lenguajes análogos y digitales, tangibles e intangibles. El renacimiento del jeroglífico en el contexto internet, y el lenguaje como virus (Burroughs), que tanto en manos de un artista como de un publicista, pueden significar manipulaciones o iluminaciones contagiosas, depredadoras, salvajes.
Esta deriva experimental del lenguaje utilizado por el arte en general, y el campo de las relaciones públicas, que se representa desde la invisibilidad cuando es hablado, y desde la materialidad arquetípica en su campo simbólico, es analizado desde la invención técnica y narrativa que emergió desde el antiguo teatro de sombras, la invención de telescopios y linternas mágicas como precedente para la investigación de arte, ciencia y tecnología, entre otros dispositivos que reflejan el transito entre la imagen análoga y digital, como la fantasmagoría, el daguerrotipo, la fotografía, la poesía visual, el cine, el inicio de la informática, el vídeo arte y el cine expandido, y posteriormente, el desarrollo de videojuegos y aplicaciones para dispositivos fijos y móviles.
En resumen, las acciones de la 12 Bienal de Artes Mediales, convergen en el concepto común de Hablar en Lenguas, como una metáfora de la bíblica Torre de Babel para poner en practica un dialogo que potencie una comprensión sobre el lenguaje que habita Internet, esta vez como una Torre de Babel invertida, que representa el internet profundo (deep web), y como éste determina nuevas formas de investigación y producción sociales, culturales, económicas y políticas, donde las hegemonías de poder encuentran una crisis estructural debido al reajuste paradigmático que imponen los tránsitos análogos y digitales, y donde la comunidad en general vive un trance histórico de apropiación de los espacios colectivos.